viernes, 18 de diciembre de 2009

Del calor y del frío.


Es que la noche que me vuelve un animal rastrero, que busca con su mirada roja ese olor que guía, esa necesidad rastrera de inmiscuirme en la tierra, lo húmedo. Es que la mirada de la luna acentúa mi cacería, la alarga y la afila como ese brillo espectral sobre los edificios que fungen como árboles de mi selva. Es que las luces de la ciudad revelan los caminos más obscuros por los que hay que transitar mientras se huye del resplandor artificial que representan. Es correr en las sombras para esconderse, para no ser presa.

Es que en el día remonta el sol como lo hacen los delgados y minúsculos pelos de mi erizada espalda, que tuercen cualquier flujo de energía frontal hacia el cielo, es que el sudor de mi pecho implica la necesaria evidencia de mi corazón trabajando, mi vida, mi agua desprendida hacia el cielo en forma de un vapor oscilante. Es que en los días nublados todo se apacigua, converge en lo mío, en el guardar a cada paso energía, o quemarla en calor dentro de las sábanas con amor y odio, con sexo y dolor. En todo caso, el día es hacer fluir energía del cielo.

Las noches y los días son de conductas diferentes, y en su naturaleza de frío y fuego, se esconde la hermosa antítesis de sus implicaciones. Que si es sol y calienta, que si es luna y refresca o enfría.

Las frías noches, son una verdadera pesadilla sin el calor de un humano. La soledad es el frío en nuestras almas, aunque a veces, es bonito sentir el frío si uno está bien abrigado. El calor de los días son una verdadera insuficiencia si se está solo. Solo así se puede pensar la incineración de un alma. Afortunadamente, las sombras en el día también son compañeras.

La desolación del humano es la pesadilla del calor en el sol, y el frío cortante de la luna y las estrellas.

La desolación es una pasión extrema de la soledad, que es un estatus normal en todo ser humano.

Un ser se vuelve humano, de manera análoga en la que un niñ@ se vuelve un(a) adult@, cuando afronta ciertas pasiones. Una de ellas, es la desolación.

Salir exitoso de dicho enfrentamiento siempre es cuestionable. Salir airoso de dicho cuestionamiento es imposible.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Escudriñé el cielo en busca del cometa y chocó conmigo.

Paradógicamente, mientras escudriñaba el cielo, me he encontrando el cometa, y terminé extinto de vida. Ahora que resurge en mi aquel astro, sigo...


La sacerdotisa de jade -verde jade-, me ha instruido en mis errores. "¡No desistas!, solo acontece de manera diferente" es lo que me dice siempre que con ella encuentro los errores y prejuicios que habitan en mi mente. De ella he hecho consciente la crueldad de amputar lo que le hace a uno más feliz.

Mientras camino por estas calles ahora desoladas de Coyoacán, con ella se encuentra por el otro lado de la acera, de manera metafórca, aquél de quien dudo de su amor como dudo de mi existencia. Lo dudo porque no puedo asegurar algo de manera completa sin caer en alguna tautología. Dudar, en mi experiencia, eso es algo completamente acertado, todo tiende a caer en una paradoja o una tautología. Y entre el que si me ama o lo amo, o nos amamos, tuve fé y creí que ya lo había encontrado como esa parte constante en mi vida. El destino hasta ahora ha escrito la manera en la que nos ha vinculado, y es ahora que hay escritos suficientes en esta historia para decir o afirmar los hechos. Sin embargo, parece ser que este caprichoso y paralelo destino sigue forjándose sin permitirnos definir nada. De un lado del espejo, se me es heredado un espíritu que no pedí y que sin embargo, ahora nace en mí como una flama, en concecuencia, una luz personal que pone en evidencia mi oscuridad más perpetua, y que sin embargo representa un pequeño instante de tibiedad que alienta mi caminar para poder encontrarme. Del otro lado del espejo, de este lado en el que vivo, vivo aparte y encuentro en mi cotidianidad a otro con el que estoy y me reconforta. En este lado del espejo yo, y del otro lado, él reflejado en mí.

Entre cada paso durante este último año, desde el momento en el que lo conocí - o reconocí-, no ha dejado de haber esa leve intermitencia que suele hacerme remembranzas a los pensamientos orientados lo que aprendí de él, sea lo que sea, o como sea. He cambiado porque nos encontramos. El impacto sufrido ese día, ese bendito y maldito día, no se recuperará nunca, no fue algo reversible. Es como si un cometa chocara con la Tierra y la sacara de su órbita.

En este mi planeta, que soy yo, ha llegado a vivir mucha gente. Algunos gobernantes, algunos héroes, muchísimos romances, pocos amores (muy pocos). Pero nunca había llegado algo que viniera a partirme tanto en mi madre. Me incitó a matarme un poco y mató en consecuencia a todo tipo de ser vivo en mi superficie, cambió mi órbita, sentenció mis actividades. Cuando en la naturaleza pasan estas cosas, resulta que suelen ser de esos ajustes que la vida hace para que de vez en cuando las cosas cambien bruscamente, así sin mas. Me sacrifiqué, aunque en un proceso muy sofocante, lento y frustrante. Si, sacrificarme es algo que me ha permitido madurar de alguna manera. ¿A quién me ofrecí? A él. Pero como todo ser divino, se que me amó demasiado y me dejó juguetear con mi libre albedrío, pese a que yo no lo quería. Por otra parte y en paralelo, se que nunca podré afirmar un NO en su rechazo o un SI, en su afinidad frente a mis circunstancias. Ante eso, solo me quedan los actos de fe, los milagros.

Entre otras cosas, de él he aprendiendo lo que sus esporádicas, circunstanciales y breves apariciones me han enseñado(cosa que considero un verdadero milagro). He encontrado que en mi espacio, él sólo existe como una imagen y asociada necesariamente a una virtualidad ideal en la que se volvió por ser lo que era y ya no es. Ahora que lo veo, lo concibo más como un santo que como un dios. Encontrarse con un santo es muy poco frecuente... que decir poco frecuente, es rarísimo. La sensación de ello sólo me la ha producido conocerlo.

Mientras tanto, aquí en la tierra, me permito acurrucarme en un rincón de mi cuarto a seguir con mis tareas: pensando en sistemas coopernicanos ente propuestas geocéntricas y heliocéntricas, imaginando los cometas de Tycho Brae, descifrando los horóscopos de Keppler, la acribillada sádica y maquiavélica de los sistemas aristotélicos por Galileo, enuncio teoremas de electrodinámica clásica, me confundo con la relatividad en campos electromagnéticos, arreglo computadoras... Mientras tanto, repito esquemas y palabras entre un poco más de aprendizaje para seguir avanzando con mi órbita, ahora alterada pero constante en mi ciclo de vida.

Estoy despertando de la resaca que me tocó por tomar de su copa, de su copa de fuego que ilumina, que emborracha. Me ha dado a probar de un elixir mortal, y es así como he decidido suicidarme. Nos hemos asesinado y ahora quien sabe que somos. Pero insisto en seguir girando ante este sol. ¿Él? quien sabe. Apenas puedo encontrarme a mi como para salir a su búsqueda.


La sacerdotiza de jade, me ha indicado que necesito un poco más de experiencia.

(La sacerdotiza de jade, idea invocada por Darika Guillén Buendía)

lunes, 30 de noviembre de 2009

Hyperdrive! - The Devin Townsend Project





So cold, in the night, where the river flows, where the river flows.
So cold, in the night, where the river flows, where the river flows.

Sail away, hey, I'm sorry; every day is a new day.

Hooray for love, hey, I'm lonely,
Trying to find a new way.

So cold, in the night, where the rivers slow, say the river's slow,
So cold, in the night, where the rivers slow, say the river's slow,
So cold...

Connect!

So cold, in the night, hold on, hold on
So cold, in the night, hold on, hold on

Sail away, hey I'm sorry; every day's a new day,

Hooray for love, hey I'm lonely,
Try and be on your way,
On your way, on your way
On your way,

jueves, 12 de noviembre de 2009

Del delirio y la madurez


Me dejo ir por la entrada del bullicio. Huyo.

El delirio es un acto en el que se desbordan las pasiones. Las pasiones se desbordan por ser poco controlables, por ser efímeras, por ser lo que son en muchos como yo: tormentas y tormentas, catástrofes de agua y cielo moviéndose en cantidades insospechadas para chocar con la tierra en un roce, en una caricia que imprime el esbozo de un recuerdo, una cicatriz, un acto terrenal. Y ante el delirio, no hay mucho que hacer mas que esperar a que merme.

El delirio de huir se asemeja a la estampida frenética, la histeria colectiva. Es un escape con caras llenas de miedo y pisadas que detonan sufrimiento. Estampida cruel que al que se cae asesina. Es un acto en el que la consciencia no cabe, en el que no hay líder ni razones. Es algo que nace desde el fondo de un alma y acontece en este mundo como la flor: un milagro de la vida que se queda en un suspiro frenético de belleza insospechada, el último suspiro.

Ante el insípido y trémulo destino que se burla y se burla, también acontecen delirios y caprichos como la vida y el amor, el odio y la benevolencia. ¿Qué diablos sean o signifiquen esas palabras?... carece de importancia tratar de encerrarlas en una prisión racional, porque mientras más tratemos de explicarlas, más enredaremos su significado tácito, que es el que vive con nosotros, que es personal y jamás general.

Quizás haya humanos que no amen, que no odien, que no sean benévolos, que "no vivan". Ante tal estado de apatía, no hay mucho que hacer. Sin embargo, con el pesar de todos los aquí presentes y con el gusto de algunos que se conocen entre si, aquí estamos. Que si somos crueles, que si creemos en cosas diferentes, que si percibimos las cosas de manera desigual, que si adjetivamos cada palabra que escribimos, eso, todo eso queda como lo que es: un calificativo para tratar de llenar un hueco en esta prisión racional en la que nos encontramos. El hecho tácito es simplón y trivial: aquí estamos, con todas la maraña de implicaciones que representamos para este mundo, con todas las caóticas consecuencias que hemos venido declarando y sufriendo de manera particular como humanitos que somos.

Y así, siendo uno el que es, que fue y que será durante este instante y toda la vida que le reste, al menos estoy siendo. Se es paralelamente en otras partes, en recuerdos y palpitaciones por ejemplo. El estar de alguno siempre queda impreso en la mente, el corazón o la existencia de algún otro. Ya si está jodida la cosa, al menos se es en uno mismo. Es por eso que en un mismo tiempo se puede acontecer en distintas partes. Huir al no-acontecer es tan tautológico como tratar de plantear la existencia de la inexistencia.


No hay forma de huir de lo que se ha venido aconteciendo. Se revela ante mis ojos como una gran avalancha, como un acceso a lo más profundo de mis miedos. La caja de Pandora había guardado para el gran final el peor de los demonios, y este ha sido liberado. La caja ahora solo es la cáscara de una fruto que dejado una semilla en este mundo. De sus hojas y raíces nacerá lo que será algo nuevo para mi. Kan: amarillo y semilla al mismo tiempo. Tal significado solo implica el nuevo comienzo, la esperanza de un acto. ¿Pero qué se puede esperar de la semilla proveniente de la caja de Pandora propia? No lo sé, como no sé que pasó con todo lo demás que me acontecía, como todo lo demás que llegó implicar para mi el significante de una vida pasada pero presente en estos días. En otras palabras, me encuentro afrontando un Yo que no conozco, que no ubico y me cuesta reconocer. Me encuentro en una etapa de cambio tal, que no puedo voltear a reconocerme. De alguna manera eso me gusta. Algunas personas lo llaman renacer, otras morir. Para mí, sólo es no reconocerse porque se ha cambiado mucho, y en todo eso, también creo que esos cambios no son induciles o deducibles, sólo acontecen como ciclos naturales. Forzar los cambios para salir de los ciclos es algo inútil y contranatural, por lo tanto, no se puede lograr. Si uno quiere morirse, si uno desea hacerlo, no basta con desearlo, hay que esperar morirse o matarse. De igual manera, si el deseo que se invoca es el del cambio, solo queda esperarlo y anhelarlo, forzarlo de nada sirve. Fomentar las circunstancias propicias para que el cambio se de, es sólo preparar la tierra para la semilla. El cambio, como una semilla, puede sembrarse y no nacer.

Madurar no es la palabra que estoy buscando. Asemejarme a un ideal deseado es demasiado ambiguo, porque lo que deseo cambia cada día. Más bien, me he formado y cultivado a través de la experiencia de estos últimos meses, llena de amores nuevos y viejos, alguno sembrado, pero sin germinar, guardado, refrigerado en alguna parte, quién sabe si muerto. Muerte la que se ha propagado en otras partes, muerte la que se ha engendrado en el suicidio de algunas personas... de una persona. Quizás intento de muerte, lo desconozco todavía. Suicidio relativo, intento de suicidio, desesperación y neurosis. Frustración. Ante tal espectáculo, y ante tal espectador solo ha quedado un resultado: la risa. La burla y la caja de Pandora, el acto de Gambiche y sus secuaces, Lothusmater-Dearevii, Cahuac, la añoranza por un mundo mesoamericano fundido en mierda, la decepción y la realidad como verdugos de una vida, el drama; todo lo anterior como episodios simplísimos de un recuerdo, todo como una manera muy barroca de explicar algo muy simple, intentos frustrados y dementes que tenemos los humanos en nuestro afán de querer saber las cosas, de querer sentirlas, de necesitar el estímulo de algún ente ajeno. AMOR... ¿amor?. No hay palabras para describir cosas que son tan difíciles de explicar.

No es madurez la palabra que busco, pero es la que acontece. Y en mis días también acontecen nuevos soles y nuevas experiencias. Lo único que permanece estático es la apatía generalizada de negar mi realidad, de no querer afrontar el mundo en el que vivo, de no entender que pase lo que pase, me enamore de quien me enamore, viva como viva, las cosas son tácitas y encaminadas a lo mismo. Los seis demonios de mi vida han terminado su concilio. Las puertas cerradas se han abierto, los locos de la soledad dejaron de ser mendigos en una calle de la ciudad de los poetas muertos en vida. Hay cambios, y sin embargo, en el fondo de mi corazón sigue habiendo lutos y tristeza, sigue habiendo una esperanza agonizante, incrustada en una cicatriz. Sigue habiendo visiones lejanas, de vidas pasadas o futuras, sigue habiendo esta psicosis enagenante por lo ajeno, por lo ausente. Es de humanos estancarse mientras se crece.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Defy - Disturbed

Saludos a la izquierda de USA....




"That's what I believe got him re-elected is the people knew that you could believe what he said."
"Well that's your repressive government."
"Our country is strong" ("How many people to march I don't know"), "We go forward to defend freedom" ("Take the government's side"), "And all that is good and just ("JUST yeah right")in our world."


All my devotion betrayed
I am no longer afraid
I was too blinded to see
How much you've stolen from me

You wanna know why I feel so horrified?
I let my innocence die
You wanna know why I can't be pacified?
You made me bury something
I won't be sleeping tonight

I only wanted the blessing made
Now I've been labeled a renegade
It seems so clear now what I must do
You're no immortal
I won't let them
Deify you
They view you as the new messiah
Deify you
Renew belief in some demented man

You wanna know why it seems the passion's died?
We've all been living this lie
You wanna know why my will's been fortified?
You've made me hunger again
Good luck sleeping tonight

I only wanted the blessing made
Now I've been labeled a renegade
It seems so clear now what I must do
You're no immortal
I won't let them
Deify you
They view you as the new messiah
Deify you
Renew belief in some demented man

All my devotion betrayed
I am no longer afraid
All my devotion betrayed
I am no longer afraid
I was too blinded to see
I was too blinded to see
All my devotion betrayed
I am no longer afraid
I was too blinded to see
How much you've stolen from me

Deify you
They view you as the new messiah
Deify you
Renew belief in some demented man

Deify you
(All my devotion betrayed)
They view you as the new messiah
(I am no longer afraid)
Deify you
(I was too blinded to see)
Renew belief in some demented man...
(How much you've stolen from me...)

martes, 10 de noviembre de 2009

Descanso en la playa

[Guardado como borrador el 30 de octubre del 2009. Sin editar, y publicado hoy.]



Las mareas que ahogaron a un gusano, terminaron con su cadáver y lo integraron a sus fuerzas marinas. Disipado en el escondite de algún olvido, se quedó lo que pudo haber permanecido como el amor de todos los amores, la lucha épica de la realidad contra el ideal, el drama de todos los dramas, la palabra que todos los judíos buscan, el enigma más esotérico siendo revelado. Y en ese bosquejo de la ilusión impertinentemente invocada, me encuentro yo, en una playa, disfrutando con mis pies la inducida sensación morbosa al pensar que entre mis dedos pasa aunque sea un poco del baboso cadáver de aquel gusano. Descanso de emocionales, vivo en una especie de vacaciones forzadas. Me acompaña una sombra, la sombra de algún hígado baleado. Una llorona sombra que con su mano intenta alejarme de la playa. Es de luto y de pandemias, es de pasiones nunca aterrizadas, es de frustraciones. Allí, en mi playa, me encuentro yo abrazando mi destino en un atardecer que aparentemente permanece inmóvil.

De la arena dorada y el agua plateada se hacen espejos esporádicos que en la planicie de esa playa muestran figuras de otros yo. Me miro en el espejo semi-metálico que se hace por la lamida del mar en la arena y veo figuras distorsionadas de lo que presuntamente soy. Y me agacho, para fijarme en el detalle, y resulta que la tierra, envidiosa de mi hallazgo, se lleva consigo ese bosquejo de mi.

Volteo al cielo, y es de noche. El eterno atardecer se ha esfumado entre mis ojos y no he visto al sol entrar al mar en su épica lucha por hacer que de nuevo amanezca.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Didn't you know it? - Bel Canto

Yeah!!! Un video completamente noventero!!!!

Bueno, la rola de los discos es significativamente mejor...




Didn't you know it?

Hey, sibling souls, are you out there?
Children of the earth, where are we going from here?
'Cause it hurts the young to live in the open with so much love to give
But too little to spare

Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make
We stumble and we hesitate
Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make

She said I was not to worry
Hadn't seen her since, but was totally convinced
'Till I heard them say; "Didn't you know it?
Mary, poor child, was alone
When she died"

Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make
The promises we disengage
Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make

Time for the unfree
Time to rejuvenate the elderly
Time for the unfree
Time to lend a hand

Time to lend a hand
Time to make a stand

So many things I don't want to know
Told a freind one day but he says I'm o.k
'Cause we're born within the x-geberation
Virtually real with a planet to heal

Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make
We fumble and we hesitate
Yeah, yeah, yeah, the moves we make, the moves we make

Time for the unseen
Time to eliminate tomorrow's fears
Time for the unseen
Time to make a stand

Do you follow me? No?
Well, it's time to move on and to set our wills free

Do you follow me?

viernes, 30 de octubre de 2009

El pasillo.


El camino al inframundo era estrecho, con muchas almas y muy lento. Cada paso era una verdadera eternidad. Su longitud no podía ser vislumbrada desde lo alto de los muros, estrechos muros en los que gárgolas inmóviles cuidaban nuestros pasos. En las paredes de dichos muros, de vez en cuando se encontraban antorchas medio encendidas. Otras veces, las paredes rasguñadas señalaban lo terrible de los azotes. El olor a sangre y podredumbre dejaba a los mortales visitantes de ese lugar la incapacidad de reconocer el olor de rosas al de cuerpos en putrefacción. Cuando la luz no alcanzaba para poder saber qué había en frente, se volvía común entre los presentes, la orgía violativa para sofocar un poco, con efímero placer, aquel agobiante instante que se extendía eternamente. Los gritos de violaciones y de placer se mezclaban en ese pasillo, el sudor y la sangre no encontraban diferencia. Todos los allí presentes sabíamos que al final de ese pasillo se encontraba, por fin, la entrada al inframundo.

A lo alto, un cielo rojo con nubes negras se alzaba. Había noche y atardecer, pero nunca día. El sol no era una estrella, sino el carruaje del señor del inframundo, que dia con día recorría todo su territorio para revisar que ninguna alma se escapara. De vez en cuando, por medio de sus demonios y hechiceros, por medio de visiones invitaba a los mortales a ver su el espectáculo de su reinado. Al final, sería ese el hogar de los elegidos para la eternidad que restase.

Y es que entonces, al final de mi visión, me encontré con el príncipe de las tinieblas hablando del futuro de los astros caídos, charlando de los muertos en vida, discutiendo de los enviados del inframundo al mundo de los mortales. Uno de los sirvientes alzo la copa por aquél corrupto y gritó: larga vida a quien se embriaga con el fuego del inframundo!

miércoles, 14 de octubre de 2009

Ausencia


En un rincón del tiempo que susurra tu nombre, escucho las voces que en la noche me dictan esta sensación de ausencia que generas. A veces la tibieza de los recuerdos me permite dormir tranquilo, o la almohada a la que uso como placebo por tu falta. Hoy, sin embargo, la realidad es demasiado inminente: esta noche al menos no dormirás conmigo.

miércoles, 7 de octubre de 2009

De la muerte y la energía



[Retomado del 3/05/09]

Es de la vida y la muerte el mismo asunto: transición de niveles energéticos en escalas energéticas. La integración de la energía en la muerte es con el todo, y de la vida es la propagación de la misma a través de la armonía que permite estructurarla como un caos de complejidad infinita. Todo al final cuentas con algún orden, pese a ser complicado con significante infinidad. La muerte entonces, se me traduce como un cambio en el que la interacción energética cambia de nivel. Entonces, sucede que todo el tiempo todo está muriendo cuando cambia de niveles energéticos. No por ello, se deja de tener vida, pues todo lo que acontece en este mundo tiene vida propia por el simple hecho de propagar energía por medio de su manifestación en algún nivel.

Aquí hablo de cambios de energía en niveles, no en escalas. La escala de un algo es el objeto. Por ejemplo, la materia. El cómo ésta va cambiando de niveles, es la complejidad de su existencia y la ramificación de ésta en otras escalas depende conforme la progresión o retracción de sus niveles. La conjunción de la complejidad de cierta materia se puede volver algún complejo orgánico, la integración de materia orgánica se conjuga en seres cada vez más complejos. Todos ellos cuando "mueren", derivan de nuevo en materia no orgánica o en alimento para otros seres, pero no por eso, dejan de ser seres vivos, sólo es un cambio de nivel en su estructura, que al final, venía de una escala, propiciando así, la interacción energética que representa el proceso de morir.

jueves, 1 de octubre de 2009

El altar de Gambiche (la entrada número 50)




Entre sombras de hígados agujerados se encuentra este altar. El altar de la noche que en los días desaparece, y que sólo en un kin lluvioso o poco piadoso, como un espejismo de la tormenta, se materializa con su pedernal de granito y carbón a mitad del gran patio cuadrado que tiene. En él, los sacrificios se prolongan durante noches de luna nueva y sin compasión ante la tortura de los allí sacrificados. Cisnes y gansos negros llevan en sus monstruosas garras de ocelotes, las cabezas de deseos amputados. Todos los allí presentes ofrendamos las frustraciones que en nuestra vida se han confeccionado.

En el trono que presencia dichos actos se encuentra el temible mapache Gambiche, que diferencia de otros hechiceros, es especial por ser el juez de los nahuales y criaturas del inframundo. Es inquisitivo incluso con sus propias pronunciaciones, sin importar incluso lo impecable de sus decisiones. Y de sus sortilegios nacen maldiciones que predominan hasta nuestros días, maldiciones cíclicas de las cuales nadie puede librarse si no es con el consentimiento y piedad de este ser tan temido entre los hombres. Es el dios oscuro de una noche envidiada por el día, es la deidad que se esconde confabulando los tremendos placeres que nos llevan a la destrucción, es quien nos vende justamente nuestro lugar en el infierno y quien celosamente guarda entre su tórax vacío, una mariposa ennegrecida por el lugar en que se encuentra: un tórax blanco como el marfil, de costillas con huesos que calan de frio, costillas sueltas que suenan de manera estridente si son tocadas, si son siquiera rosadas por un soplido que entre su manta negra se cuele, soplidos que generan silbidos tan ensordecedores y reveladores como las visiones más apocalípticas.

Antes de cada amanecer, su séquito de uayebs lo arrastra como un cadáver inmóvil y sin fuerzas. Pronto, al primer rayo de luz que toque el altar, los uayebs se vuelven piedras sin forma, como deidades que han dejado de serlo y purgan su condena sirviendo a Gambiche. Y cuando recién anochece, de ese círculo de piedras deformes se junta un polvo que forma los huesos de esa criatura. De la tierra desertica y polvorienta, o lodosa y fangosa nace como una figura de barro que poco a poco se transforma en varios perros. Entonces es jalado por una jauría de xoloscuincles ciegos y viejos. Pronto, del norte y del sur llegan volando dos pájaros, encargados de guiar a los perros desde el centro del templo hasta el trono del monarca inquisidor. La formación en su vanguardia queda dirigida por un quetzal y quedan protegidos en su retaguardia por el pájaro muan, pájaro extinto de cuyo chillido, mas que canto, se escuchan los sonidos de todos los animales exterminados, cazados y en sufrimiento. Cuando en ambos casos sus acompañantes dejan en su sitio el saco de huesos, se hace un silencio sepulcral. Si son los xoloscuincles y los pajaros, ellos se esconden entre los huesos y de ellos mismos nace este ser, que entre las sombras de un día es un nahual o un mapache, un ocelote o un espectro en búsqueda de su victima, acechando, conociendo, inquisitando cada paso de los mortales que sigue.

Aquel día, aquel dia en el que moriste, Gambiche estaba allí, presenciando al que te veía, y tu, con tus ojos moribundos, con tus ojos de placer inescrutable, lo viste, lo viste y tomaste tu destino entre tus manos, pues quien ve a los ojos, debajo de la capucha negra que le protege, se queda sin aliento en ese instante. Aquel ganzo encima de ti, aquel pájaro ya deforme, se torno negro, te arrancó la cabeza, se dirigió volando a medias al pedernal de piedra para ofrecer tu último suspiro a la noche perpetua.

Aquella velada, los que nos encontrábamos presentes disfrutamos con singular alegría tu muerte, que fue la muerte del héroe vencido por su propia tragedia, el héroe fallido que no pudo concretarse, el presagio detenido, la leyenda sepultada. Aquella noche de luna nueva y apenas ocultándose el gran Ahu, una mariposa blanca se posó entre un circulo de piedras deformes, justo antes del último rayo de luz en la tarde. En ese instante, supo que se volvería prisionera de ese demonio. Se entregó, siendo presa, pero a su vez, se volvió en un arma. Luego de tocar el suelo, de su blanco insospechado brotaron esporas negras. Ciega y sin poder volar a otra parte, la pequeña mariposa se volvió en una gigante polilla negra, que en la noche, al ocultarse el sol en el oeste, le brindó a Gambiche el único don que tiene: el corazón que le permite embriagase de fuego, de una felicidad efímera pero orgásmica. Después de eso, el saco de huesos helado, encerró su posesión más valiosa en lo más inaccesible de su cuerpo, la parte interior de su pecho, el único lugar, en el que la hermosa mariposa negra podría estar hospedada durante toda la eternidad restante...

Feuertrunken!

(RIP)

jueves, 17 de septiembre de 2009

De los deseos que yacen en los sueños antiguos.


Y nosotros aqui presentes, no tenemos la culpa de que el destino entreteja estas cosas que no entendemos. Misterios y palabras que sólo se distinguen unas de las otras por los
patéticos sonidos que confeccionan sus destellos. Palabras mordaces que forman enunciados precipitados, paranormales, devastadores, que arrancan con sus pronunciamientos y desdenes, las verdades intrínsecas de lo que ahora hemos venido rechazando, escondiendo, vigilando, arrestando, encarcelando y torturando desde que nos conocemos.

Vivimos en la luz del medio día a mitad de un eclipse de sol. Queremos desterrar imágenes que frustraon vidas pasadas pero sólo dejamos en el escondite más recóndito de nuestro pensar: nuestros sueños. Allí vivimos y creamos maravillas psicotrópicas, paganas, precipitadas como lluvias torrenciales, como tormentas. Sucumbimos ante vientos nuevos de histeria colectiva, nos hincamos pidiendo clemencia ante el terremoto que acontece en esta realidad estrujante. Nos asfixia no poder respirar de nuestro aliento, y sin embargo, en este juego tortuoso, quizás hemos podido adaptar nuestros pulmones a la falta del aire ajeno.

Amamos. Amamos y queremos lo que tenemos porque vivimos en esa pueril fantasía de la posesión, porque no podemos dejar nuestros conocimientos o experiencias, porque vivimos encerrados en este mundo de barrotes invisibles, de prisiones insospechadas con racionalidad de candado, de trampas por nuestro estatus constante y demente. Preferimos vivir en una celda de proporciones gigantescas, pero celda, a final de cuenta: ciudad de pobres que entre espejismos de pertenencias se esconden. Nos volvimos animales de una cruel exposición de circo, circo de un ente que se mofa con nuestra estupidez colectiva, que se revuelca entre las tripas de personas asesinadas por culpa de políticas económicas, que magulla menudencias de humano generadas por la inconsciencia o la persistencia de personas como nosotros: animales que no podemos negar nuestro lugar y que, quizás sabiéndolo o no, consumimos cosas, objetos o ideas que matan a más personas por el hecho simple de haber sido consumidas.

Si llegamos a poder negar la realidad en la que estamos, terminaremos enfrentando otras realidades que nos separarán, quizás así lo hemos decidido hasta ahora. Pero si no es así y logramos vencer al Atlante de este mundo, su poder se desvanecerá. Para ese entonces, el gigante que sostiene al mundo se habrá vuelto la punta de un alfiler, que a su vez estará sostenido por la punta de obelisco, que a su vez será la punta de una pirámide. Y cuando caiga el mundo del lugar que lo sostiene, reiremos los inconformes con una demencia incontrolable, sonreiremos porque en ese momento, la cárcel se romperá, esto dejará de ser un sueño y podremos respirarnos mutuamente, como un mal chiste de la vida, como un tedioso juego en el que se gana perdiendo, como la vida eterna que se gana muriendo, como el amor eterno que se hace al jamás realizarlo. Este mundo valdrá madres, y aunque que ha alcanzado mecanismos tan sofisticados como ridículos para sostenerse, se que podre volver a verte a los ojos sin problemas. Entonces cambiarán los atardeceres y reinará una paz por el vértigo que nos convertirá en estrellas de un cielo ajeno y sin nubes, con la luna escondida en su oscuridad de ciclo nueva o a mitad de cuarto menguante, destinando su canto a nuestro descanso, ese sueño en el cual nos pertenecemos mutuamente y en lo ajeno...

lunes, 31 de agosto de 2009

Get Yourself High - The Chemical Brothers

YEah! este video rifa.... no describe mucho más que mi estado canabinoideo....





Treinta y tres


En ese mar de acuosidad incomparable, se alza como un gusano queriendo alcanzar el cielo, este anhelo que poco a poco se transforma irremediablemente en un recuerdo. Se deslumbra, se entristece, se queda mudo. Como un ciego y sordo suspiro que no llega ni a quejido, el pequeño animalejo se contrapone a la mirada de todo ese universo de agua, como negándolo, como luchando por no morirse ahogado. A la mitad de este desierto de olas y soles hirvientes, agoniza sin sentido, este pequeño gusano.

Suele ser muy terco, ese sentir que tenemos nosotros los mortales. Esa testaruda necesidad de no seguir lo que deseamos, o de desear lo que no podemos seguir. Preferimos construir imágenes que nos recuerdan los deseos y las flamas de incandescentes instantes, preferimos cronstruir proyecciones que no permiten más que encerrarnos en pasados, en recuerdos. Suele ser terco y cruel este destino, que nos permite agasajarnos en nuestro masoquismo sin sentido. Benevolente y cruel, terco y complaciente. Quizás algo retorcido recordarlo, permitiéndonos amar sin poder, o tener poder sin amar.

Y en otro lado, en un lago de terrosidad incomparable, miro al cisne que se levanta en vigilia. En sus pies hay un cadáver que se asemeja a ti, sin tu pelo largo, calvo y frío, descompuesto. En esa visión solo puedo estar viendo el acto, ha muerto Feuertrunken, y el asesino de sus días ha sido él mismo por medio del cisne. El cisne que ahora es ganso, sigue testarudamente parado en el cadáver, marcando su territorio, haciendo eterno el momento de su amor incomparable. Y aquí, sólo soy yo el que pudo ser testigo de esa hazaña. Atrás de mi, está mi reflejo viendo esa patética escena de obsesión y amor, entrega y fastidio. Juzgo con mi toga, y abrazo a mi perro de peluche. Yo, el que esta viendo y el que está espectando, me quedo viendo porque esta escena es un espejo, y en ese espejo se refleja al que ve espectando y al que ve al espectador. Es en ese reflejo que me encuentro escribiendo. Atrás de mi, hay una escena que ignoro, alguien que me ve, y atrás de ese alguien, hay otra escena con alguien más que lo ve a él, a mi, y a los otros dos. Así, pasa esta vida, en la que al final de las escenas, hay un celoso cisne arriba de un cadaver que ve una última escena: en un mar de acuosidad incomparable, y con muchos ánimos de seguir vivo, se halla un gusano con el anhelo de llegar al cielo, a una tormenta.

martes, 18 de agosto de 2009

Weak and powerless - A Perfect Circle

A Perfect Circle- Weak and Powerless


Tilling my own grave to keep me level,
jam another dragon down the hole.
Digging to the rhythm and the echo, of a solitary siren,
one that pushes me along and leaves me so.

Desperate and ravenous.
So weak and powerless over you.

Someone feed the monkey, while I dig in search of China.
White as Dracula as I approach the bottom.

Desperate and ravenous.
So weak and powerless over you.

Little angel go away; come again some other day.
The devil has my ear, today; I'll never hear a word you say.
Promised I will find a little solace and some peace of mind.
Whatever - just as long as I don't feel so...

Desperate and ravenous.
So weak and powerless.

Desperate and ravenous.
So weak and powerless over you.

martes, 4 de agosto de 2009

Bomitadas del destino


He aqui un bosquejo de la pérdida de tiempo. Es pérdida pero es ganancia. No hace falta especificar, solo actuar. Ahora, en la orilla de mis emociones, veo una mano y un cuerpo, una sonrisa y un sexo... qué sexo!... que besos!... que cosas tan peculiares que pasan y me han hechizado. No es el primer hechizo del año, ni tampoco el primero diferente, pero creo que es uno de los que me alejan más de un deseo platónico, de aquella bomitada del destino y la feuertrunkina, la necesidad de cariño, la busqueda de proyectar un poco mi tiempo con alguien. Y tu, ¿quien eres?... nada se sabe en este mundo de los elejidos por dedazo de mi alma. Son solo constructos efímeros que me permiten, por medio de la esencia que tienes, generarte un aditivo para poder pasar el tiempo conmigo, para poder consolidad sentimientos que me emocionan. Silencio... no mucho, no tanto, no incómodo, tranquilo. Nunca antes tánta química en la cama, pero qué ganas tenemos de vernos a los ojos para reflejarnos eso que queremos decirnos y no podemos, para poder pensar eso que no sabemos, para poder sacar algo que no cabe en este mundo o en este instante, nada que se pueda hacer en este tiempo. Eso, eso exactamente es lo que pasa. Como un relámpago te instalaste en un pequeño pedazo de mi vida.

No hay mucho que decir, hay mas que hacer. A ver qué pasa...

viernes, 17 de julio de 2009

La caja de pandora en mi mirada




Se esconde un poco de tristeza atrás de toda esta mirada de entusiasmo y plenitud que me generas. En este hueco, una sombra, un recuerdo, una presencia, una flama hecha vida que se ha vuelto chispa. Y en esas ascuas hiberna un amor que no ha podido gestarse plenamente, un desencanto del destino que me ha logrado definir, una huella, un espejo, un espejismo de mi mente y de mi ser, un atajo a otra verdad a la cual trato de desligarme y no puedo, y no debo, y al final, me doy cuenta que no deseo cortar. De ese humo, de ese acto comburente entre las sombras de mi cabeza, hay esperanza sembrada debajo, a los pies de esa fogata. En ella, prendo ante la lumbre muchas letras dedicadas, muchas páginas de un libro inconcluso que no termino, que no quiero terminar, que no quiero quemar. Allí, integrándose con la atmosfera de mi mundo imaginario, me encuentro yo, trozando recuerdos como leña, haciéndolos algo efímero y a la vez fundamental para el mundo: recuerdos. Pero de este libro no acaban las páginas. Su hechizo deviene en darme ilusiones, en darme anhelos, en darme alguna fe ciega que me impide encontrar el principio o el final de cada página. De esta flama, quemadora de páginas ilusorias, ahora solo queda esta chispa, el fuego del origen del que surgen todos los incendios.

Ese hueco en mi mirada no hace falta enardecerlo. A ese hueco en mi mirada hay que aceptarlo como parte de mis formas. Será la duda en la vastedad de los hechos, la extraordinaria excepción que confirma la regla. Será acaso como ese cacho de mí que jamás conocerás, que jamás te mostraré. Será ese cacho de mi vida que me reservaré para seguir siendo yo, y tu, tu lo tendrás también en algún lado. Ese reflejo nostálgico de mi mirada será algo que te dará certeza por sobre todas las cosas, pues es lo que me mantendrá fiel a seguir queriéndote, a seguir buscándote, a seguir tratando de besar tu cuello y tus labios con un éxito extraño, quizás demente. En ese hueco se esconde la negación de todo esto que hay ahora, es por ello que debe permanecer como un anhelo inconcluso, una manía vuelta esfera de un orbe ajeno a lo que tenemos, que es real, que ha acontecido entre atardeceres fugaces y noches con luces en todos lados, con placer en camas de hotel, con cervezas y besos, con caricias y mordidas. Allí, en este lugar que es aquí, es dónde debe estar todo lo que no está en ese hueco. Será pues, la caja de Pandora que no querrás abrir.

lunes, 6 de julio de 2009

Rainbow Arabia - Omar K

Me gusta bastante.... el video no, aunque tengo que admitir que es original. La rola si como de que no! esta re buena...

No hay muchos mensajes que transmitir por aca ultimamente...



jueves, 25 de junio de 2009

Del misterio y la locura


No hay destino entrepuesto entre estas normas que nos rigen. Son tan fáciles como el fluir del viento, tan disipadas como la brisa nocturna en una noche de verano, tan verdaderas como el sin sentido que se maneja en la vida. Así pasan las enseñanzas de los sabios, que entre metáforas y símbolos, unen recuerdos de un historial colectivo que no cesa de dejar la existencia, y que con su huella ha construido costras de concreto en un mundo de piedras y plantas, mares y peces, cantos y pájaros.

Es aquí donde convergemos a lugares de humo y niebla que poco a poco nos van intoxicando, que poco a poco nos acercan más a lo otro, a lo ajeno, a lo que no es nuestra esencia y por lo tanto no nos define, y es ese espejo de la noche el que permite el desencanto de letanías racionales tan violentas, y es el artificial cielo morado de proporciones excéntricas lo que le da vida y consuelo al vivir en este suelo, en esta historia, en esta guía, en esta ciudad.

Las raíces de esta plaga nacen profundas en lo mágico, en lo encantado. Nacen en el origen de lenguas muertas o asesinadas, detenidas y limitadas por una eterna patraña, una patética idealización de un mensaje concreto, de una comunicación limpia, de una pulcritud tan carente de imperfección que genera asco, fanatismo, terquedad y racismo. Ese dogma vuelto arpía, vuela, se posa, le saca los ojos al misterio y destaza los recuerdos de promesas incumplidas de alguna sabiduría absoluta. De aquellas lenguas solo quedan olvido y omisión, evasión de un ente que se entregó en sacrificio a un monstruo. Es de esos cuerpos mutilados y olvidados, es que nace el deber de llamar a la locura a este instante.

Ante este mundo de personas con tendencia a lo normal, no hay remedio mas que la locura desenfrenada de las masas, la negación de toda norma como una consecuencia directa de la subversión y no el sometimiento de las almas como un negocio. El diálogo, el consenso, la libre interpretación, el derecho a la no información y a la transparencia de almas. Ante este mundo de tibios y secos individuos receptores de ficciones como la posesión y el consumo, no hay mas que el volvernos locos y alcanzar la independencia de sus propias vidas. Alejarnos de la idea de estatus, revolcarnos en lodo con caca, olernos las colas y montarnos, imitar ridículamente nuestra interpretación de lo más animal que tengamos. Todo en protesta, todo en signo de inconfundible disidencia. En este mundo falto de locos, hadas, fantasías y misticismos, necesitamos alcanzar aquella esencia de lo humano que nos ha sido arrebatada por convertirnos en bonitos reflejos uno del otro. Necesitamos dejar de ver nuestra unidad através de lo que nos hace iguales, y encontrar, através de nuestras diferencias, puntos en los que podamos concordar y hacer nuestras tribus, nuestras genéricas acciones para delimitar nuestros destinos a algo diferente al asqueroso consumo y producción de un capital sin chiste, sin magia, estéril y sin belleza.

Busquemos en el fondo de las almas colectivas de las piedras y los árboles, esa chispa que hace sentir a la vida algo diferente, algo que permita la exclusividad de nuestras existencias. No un objetivo de existencia, más como un consecuente tangible de lo que ahora somos y por lo que vale la pena seguir existiendo. No poseer una idea o un sentimiento, afirmarlo entre las sombras como recuerdos de un rocío nocturno o unas ascuas residentes en el seno de una fogata muerta; residuos de energía que ahora nos permite despertar en un mundo de crisis.

martes, 16 de junio de 2009

Tales of Lothusmater I




-Let the river flow- Said the master Lothusmater Dearevii to his soulmate.

-I can't go with the flow, i can't say "it doesn't matter", with the flow- he said.

-Do you believe in your thoughts? - Said Dearevii ironically.

-I believe in me, I can't wash him from my head, from my lips. The soul is something that can't be cleaned or restored. You've always said that to me.-

-Your thoughts are very different than your feelings, and yes, when the soul, your feelings, become corrupted no matter what you do, it won't be the same. The difference between angels and demons is that the first believe that God can cleanse them, and the second that God is a joke in bad taste. -

-I'm not an angel or a demon, I'm a human-

-Inside, you have a demon or an angel waiting to be born-

-Maybe, I’m not sure, even you can't be sure about that. I won't become an angel or a demon-

-I didn't want to, but you can't choose. When your body, your physical body dies, you'll become it as an essence of your environment...-

-Yes, I’ve heard this tale a thousand times...-

-So, it's not bad to choose your way when you are alive-

After that, the face of the master Lothusmater look to Dearegas' eyes, and he started to sigh. He looked very disappointed.

-I'm scared- said the disciple

-We know that, the demons are able to smell feelings-

-I've discovered that finally, I have something good to die for, someone. -

The master Lothusmater burst out laughing, after that he said:

- You are so fucking pathetic and romantic- with irony, once again.

-Yes, but if I don't die for love, for what then?-

-You could want to die for anything that you want to die for. But you can't choose your death...- And then, the soul mate interrupted his Devilmaster saying:

-In the end, it's always your choice to have something good to die for, but not the choice of your death. I know. It's always for you that you could have the choice to die for something, but not for that; you can't die as you wish. I mean, this life makes death something that you can't choose, but I want to die for something. This is new for me-

Both of them stop talking for a few seconds. Finally the demon said:

-After you have something good to die for, you will be able to find the way to sacrifice yourself. How do you want to die, or how can you find the way to that destiny? That is something you will never know. In the end, these thoughts are always clouds in your head playing with your feelings.-

-I feel it like a heartbeat, it's warmth becoming hotter- Said the guy

-It's calling you. Your soul is one of us: a demon, not an angel-

viernes, 29 de mayo de 2009

3 Libras - A Perfect Circle

No hay mucho que decir acerca de este video... es uno de mis favoritos de esa banda... Es clásica esta dedicatoria...




Threw you the obvious,
and you flew with it on your back
A name in your recollection,
down among a million same.

Difficult not to feel a little bit,
disappointed and passed over,
when I look right through
to see you naked, but oblivious;
and you don't see me...

But I threw you the obvious,
just to see if there's more
behind the eyes of a fallen angel,
eyes of a tragedy.

Here I am expecting just a little bit, too much from the wounded; but I see, see through it all, see through n' see you.

'Cause I threw you the obvious
to see what occurs
behind the eyes of a fallen angel,
eyes of a tragedy.

Oh well, oh well.
Apparently nothing.
Apparently nothing at all...

You don't, you don't, you don't see me. You don't, you don't, you don't see me. You don't, you don't, you don't see me. You don't, you don't, you don't see me. You don't see me, you don't. You don't, you don't see me at all.

martes, 26 de mayo de 2009

De la furia y la esperanza




El sol se apagará en los ojos de todos los mortales. Las sombras oscurecerán ese lapso interminable que son el día y la noche. Comenzarán a salir las estrellas entre nubes de un azul profundo. Las ciudades harán su vano intento de darle luz al universo, intento ridículo por ser opacadas ante el infinito brillo que representa el sol ante el mundo si lo vemos desde otra estrella. En esta noche, desde la tierra se podrán ver en el espacio lustrosos cuerpos que existirán, también como la tierra, en su vano intento de iluminar al vacío, solas, en su oscuridad de lejanía, siendo comidas por el interminable vacío que les rodea, representando desde aquí lo que realmente son: expresiones de la energía. Habrá comenzado la noche, y con ella esa evidencia: de nuevo veremos la lucha interminable por el espacio entre energía y el vacío, ambos luchando por existir en este presente. La densidad de energía ejecutada por esta sinfonía de luces, de gamas esporádicas, algún día terminará de manifestarse en esta escala que es la vida. Los astros serán absorbidos, eliminados. Así es el destino de toda estrella terminar siendo brillo o absorber brillo, estar en esporádicos constantes bastante opuestas, y venir de un origen incierto. La vida de las estrellas es de furia y esperanza por que así lo es en cualquier escala y nivel de vida.


La furia, que no es lo mismo que el odio, me permite agarrarme de un pasado interminablemente corto y comenzar a escribir historias. La furia no solo es de guerreros o tiranos, sacerdotes o comerciantes, todo en el humano es una expresión de furia como lo es para todo ser viviente. La furia es un claro signo de existencia, caracteriza a este espacio como algo que está presente. También permite que nos mantengamos agarrados lo que nos permite la existencia, aunque no siempre eso pudiera resistir el debacle tan histérico que es el flujo del tiempo sobre nosotros, estas cosas que existimos.


Tuvimos que tener mucha energía si quisimos agarrarnos a esto para no dejar que el tiempo nos lleve, y sin embargo, pareciera que ya no estamos unidos. Eso pasa cuando la furia genera la muerte de los vinculativos, es también cuando pueden generarse los actos de violencia. Un vinculativo es por definición, un agente que permite existan los consensos. El consenso es aplicado entonces de un vinculador a un vinculando cuando existe un vinculativo. Desde luego que no siempre el vinculando es el mismo que el vinculador. En mi caso particular, yo no soy el vinculando, suelo ser el vinculativo, particularmente en el amor. Uno puede sentir muchos vinculativos en el amor, y el amor se puede crear a partir de un solo vinculativo. La historia que se escribe en mi vida, por ejemplo, habla de un único vinculativo que no me permito encontrar, definir, o que no puedo terminar de entender. No entiendo este vinculativo porque pese a generar consenso, me impide la interacción con el vinculando. No obstante, he encontrado con profunda tristeza que este irónico vinculativo no me permite generar otros vinculativos en las circunstancias que me acontecen. Además de eso, este vinculativo tiene a un vinculando que creo ha desistido de aplicar vinculativos conmigo. Es patético que el vinculativo que tengo, ahora más fuerte, es uno que impide unirme con el vinculando, con ese ente que creo que me complementa. Eso me genera tristeza que a veces suelta neblina en el mundo que vivo. La tristeza es la consecuencia de los actos de violencia, y aunque la tristeza no siempre antecede de uno, siempre pasa que la violencia genera profundos sentimientos de furia y tristeza.


La muerte de las estrellas es siempre un proceso muy violento, por lo tanto, triste, y sin embargo genera esperanza. Siempre terminan indiscutiblemente como materia y materia, que como tal, quedan siempre así fundamentadas, desisten a desaparecer pese a que absorban o condensen, siempre generan alguna forma de brillo. La esperanza es ese resultado que queda después de haber procesado la tristeza por la muerte, en este caso, la muerte de las estrellas. Es ese paso de escala a escala en un mismo nivel la evidencia perfecta de que existe el flujo del tiempo, es lo que en nuestra mente nos permite aseverar que podemos leer a los astros si creemos que las estrellas existen. Tambien es creer que podemos tener esa vana certeza que nos da el goce de nuestra existencia. La misma muerte de las estrellas nos permite encontrar en el espacio una respuesta de que nosotros tambien existiremos en otra escala cuando moramos, y que esta vida, es un regalo que nos ha dado el tiempo para poder cambiar de escala energética en algun momento, para seguir el camino de la vida, que es solamente vivir de manera indefinida en distintas escalas de un mismo nivel.


En esta vida, estoy dispuesto a sacrificar lo más sagrado para mi, porque ese es el verdadero acto de amor, y sin embargo, creo que hacerlo no es necesario. Me basta con saber que tengo la disposición de hacerlo. Lo más sagrado para mi es la vida, pero la vida no puede ser sacrificada por ser infinita. Es entonces, que lo que sigue después en mi lista de objetos sacrificables es el amor mismo. Sacrificar el amor es el verdadero y más puro acto de amor que puede generar un hombre, al menos a uno al que el amor le parece lo más sagrado. A veces me da la impresión de que eso es lo que me han ofrendado y no lo he entendido, creo que están sacrificando el amor que me tienen como una ofrenda a mi vida, y es profundamente doloroso ver como algo que quieres vivo en tu plano, está pasando a otra escala diferente al tuya. Al final, como las estrellas, si este amor muere o es sacrificado, habrá una profundísima tristeza, y después de eso habrá una promesa de esperanza, ya que la muerte no quita vida. Es amor verdaderamente eterno si es amor que ha vivido, y es por eso que se integrará con lo otro pese a no esté en mi misma escala: nuestro plano. Se que si este amor, que creo me sacrifican, no brilla después de su muerte, al menos servirá como una fabrica de materia sentimental que habrá permeado mi vida entera, un hoyo negro en mi alma, un luto que absolverá otro amor para comprimirlo y jamás dejar que salga de nuevo. Es de alli el poder de la esperanza.


La esperanza se caracteriza por generarnos una certeza que se vuelve fe. La fe, es algo que permite el movimiento de mi alma porque me permite explicar de manera subjetiva cosas que no necesitan una explicación pero que perturban mi ego. No hay verdad en la fe o la esperanza, hay lo que uno quiera creer y se permita aceptar. Como lo he dicho antes, el amor es un acto de fe, y es en este acto que los acontecimientos más importantes y trascendentes en mi vida han sucedido. La iluminación, el acto en el que vives una certidumbre entre lo que sientes, piensas y haces, es el acto que más esperanza y fe conlleva. Es fe, porque lo único que no puedes afirmar es que sea valido para otros, pero en todo lo demás, tienes una certeza. Quizás a mi me ha hecho falta el acto de iluminación en el amor, que en mi experiencia, se ha vuelto una sombra lejana y deseada, un anhelo platónico...

miércoles, 20 de mayo de 2009

La duda y el misterio



¿Qué es la duda? Muchas cosas. La duda dice mucho de lo que uno puede esperar, dice verdades y mentiras, dice dolores y decepciones. También te muestra panoramas, alimenta inseguridades, y si dejas que te consuma carcome todo y te deja sin nada. Puede funcionar como una medida, como una forma de ver la certeza de la gente, puede funcionar como un espejo, como mecanismo de identidad si hay una duda en común.

Dudas, muchas dudas han crecido como hierva mala en esta planta, que ya de por si, tenía facha de hierva mala (por lo corriente... ja...). Pero a diferencia de ti, esta yerba mala que ha crecido a tu al rededor es non grata, y sin embargo, evidente. Tu yo evidenciamos cosas distintas, distintas formas de lazos, distintos miedos y distintas tintas en nuestros escritos, en nuestros libros de la vida. Sin embargo, somos esa casa de espejos deformados que nos saben a chiste o pesadilla, sueño o demencia, a bendición y nunca a maldición. Burlas y burlas de destinos que nos arremeten a pensar que lo que vivimos ya lo hemos vivido fuera de estas vidas, pulsos que nos demuestran que lo que sentimos ya había pasado. Un instinto en nuestro corazón que hace latir esto que pasa.

Certeza. La palabra que me falta en el vocabulario común. A la falta de certeza no la llamaría duda, la llamaría estupidez común. Y si, no es por falta de autoestima o autoflagelación, pero he pecado de estupidez. Divine me mataría por haber cometido estupidez, por ese delito, por dicha pena máxima; el gordo travestido me humillaría con su patética concepción de justicia y luego me quemaría en un árbol, amarrado y lamentando mi existencia. Yo no soy tan inquisitivo (bueno, quizás un poco, pero no como Divine), creo que la estupidez se cura con conciencia. Así me enamoró el Disidente Romántico, haciéndome sentir seguro de lo que él sentía. Tengo que reconocer que no es grato saberlo y que quizás sea mala idea publicarlo en este blog, pero a diferencia del amor que le tengo/tuve al Disidente romántico, lo que siento ahora excede hasta mis expectativas. Y es mejor así, así me permite tomar decisiones y dejar a un lado las cosas marchitas que de alguna forma me estorbaban en la vida.

De nuevo ha habido un cambio, pero no es tan drástico. Yo seguiré mi rutina, pero ahora, tengo la certeza de que mi soledad es relativa. Dejaré a un lado esa estupidez que he tenido al dudar y dejaré de volar. No se necesita ya. Me queda claro que esto no es algo que esté en nuestras manos, como alguna vez te lo dije. La certeza está en que ni tú ni yo lo controlamos. Así es. La diferencia está en que a mi me costó trabajo descubrirlo y tu lo supiste siempre. Mucho dolor, diría yo, mucho penar, y muchas de esas emociones que le cuestan a uno cuando carece de experiencia. Esa es también la diferencia, al menos en la expresión de eso.

Dolor y placer. A veces uno, a veces otro, pero nunca uno y otro de manera constante. Por más miserable que sea tu vida, no siempre estás recibiendo dolor o placer. Reducir eso a dos cosas, es como asumir que todo siempre te lleva a la consecuencia del bien y el mal que tanto refutas. Hay una gama, hay una gama que siempre lleva a una dirección, pero no siempre llega al punto final de la escala, sea el dolor, o sea el placer. La duda, por ejemplo, puede ser dolorosa y placentera. Es quizás cuando se vuelve morbo que adquiere esa cualidad ambivalente, y sin embargo, podemos afirmar que nunca es lo mismo. El misterio es otra de esas cosas ambivalentes que te hacen sentir una mezcla de dolor y placer. Si que hay diferencias entre el misterio y la duda. La duda no puede ser misterio, y el misterio si puede ser duda, cuando dudas de la misma. Cuando uno no sabe del por qué duda, es más un impulso de la inseguridad o un miedo que duda.

Los misterios son más sutiles que las dudas. Es un misterio mi amor por ti, por ejemplo. Ese es un misterio porque solo a mi me consta y porque sólo a mi me concierne. Tú nunca tendrás certeza de lo que siento como yo nunca la tendré de lo que tú sientes. Eso pasa porque somos dos universos diferentes y venimos de dos concepciones ajenas de lo que es el amor. Podría extenderlo al lenguaje que nos rodea, y que además limita nuestra capacidad de comunicar esta clase de cosas. Otro misterio, por ejemplo, es el misterio del lenguaje. Es casi tan paradójico como el concebir la comunicación através de él. El lenguaje, es únicamente una manera de acotar apropiaciones sutiles de ideas que no comprendemos. Pero es justo esa sutileza que le da poder al lenguaje. Su riqueza no radica en la veracidad de sus significantes, si no el uso que se le da a los mismos para generar formas que permiten la vinculación con lo otro. Los misterios de la lengua yacen suscritos en el alma de la lengua, en los sentimientos que plasmamos a las palabras. Sus mecanismos de funcionamiento son el espíritu. La parte corpórea es lo que escribe el humano en dicho lenguaje. Es así, que hay tantos lenguajes como personas, y hay palabras como variaciones en las letras. Todo, un engranaje sostenido en el vacío, en la nada, en el espacio, así como nosotros o el mundo, que somos una pequeña intersección entre la energía que existe y el vacío. Fuera de eso, el porqué de la existencia de todo, tu puedes creer lo que quieras, tu lo construyes y es igual de válido e igual de verás como lo es para un sacerdote, o un chaman, o un mago, o un escéptico. El por qué de ese pequeño misterio que no es general porque no existe una realidad. Quisiera creer que los misterios de la vida son esas cosas que son válidas bajo cualquier explicación y nunca encontrarán generales. El encontrar formas de consensuar dichos misterios les quita su esencia, y el vivirlos genera más misterios. Una duda surge cuando tratamos de matar a un misterio, cuando no nos es suficiente encontrarle una estructura. Dudas que nacen por nuestra falta de humildad para asumir que está bien no tener la razón, que está bien creer en algo que nos guste, que nos genere satisfacción y que no necesariamente sea verdad.

La realidad, es otro tema.

domingo, 17 de mayo de 2009

Del acto de pensarte y no sentirte

I

El día de hoy, es un día catártico por ser un aniversario de mi luto, de mis cadenas, de mi felicidad y de esas escenas magicas de diciembre. Sólo quiero liberarlas y liberarme. Sólo quiero dejar de estar en la parte oscura de mi alma, refugiado del dolor que da vivir todo el tiempo... Hay respiros y me genero la ilusión de que independientemente de lo que la vida me refuta la realidad, las cosas siempre valen la pena, al menos al final. Cómo hace tiempo no lo hacía, hoy recuerdo con nostalgia y amargura los anhelos de mi vida pasada. Encuentro que en mi camino he cambiado infinidad de direcciones. Dejé de trazar la ruta para mi destino y sin quererlo, he construido el camino hacia mi hacer, pensar y sentir.

II


Recuerdos y recuerdos. Un acto tras otro y una vida repleta de otredades que determinan y delimitan misteriosamente al alma y al espíritu, así sin más, como la división efímera entre las nubes y el aire, ente los astros y el espacio, entre la nada y el algo. Efímera y patética entrañable circunstancia que me permite la vida, que es la vida, que es el sueño de encontrarse adormilado en un mundo pestilente y a la vez hermoso. Vivir sin deseos de soledad y acompañado de la desolación que da el encontrarse viviendo así sin más. Deseos y deseos. No decir nada entre frases moribundas que sólo confunden a los lectores, no concebir nada entre las palabras y sílabas que conforman un escrito. Y sin embargo, permitir que entre ellas cada quien entienda lo que quiere y lo que lo vea cómo sea su voluntad. La poesía hace eso, logrando además que lo que el escritor siente, sea transmitido por esa efímera y división entre el sin sentido y el acto estético. Esa es la misma división entre las nubes y el aire, los astros y el espacio, la nada y el algo.

El amor, esa ancla que mantiene a mi existencia, se conforma principalmente de deseos, y en mis actos, los deseos son motor para la resistencia, la disidencia, mi terquedad y mis sueños. Más anhelos y remembranzas viven de un mundo futuro que no existe, en una profecía incumplida, en una magia vuelta chantaje. Mis anhelos viven desvirtuados y arrinconados en un montón de frustraciones. Y yo, fanático de inquisitar y de usar palabras nuevas, me reuso a huir de todo, y con los pantalones bien puestos, aunque bofos y guangos, me decido a usar también al amor como remo para avanzar contra el río. ¿Mi balsa? La vida que me atribuyó de manera negligente y sin humildad este destino, la vida que le arranco a lo otro para fundamentarme y ser lo que ahora soy. Lo que soy.

Amor. Amor. Amor y cansancio. Amor e ilusiones, soñar despierto y vivir de sueños, vivir volando... Luego, agitar mi cabeza para no seguir imaginando circunstancias o personas que pueden lastimarme más si lo sigo haciendo. Voltear en esa onírica calluela que tanto me recuerda mi casa de Coyoacán y mi mundo deseado, mi mundo alcanzado y el estatus que me sabe a mediocridad estridente. Caminando por esos lares se generan constructos y escenas que no pasarán, deja-vus de otras realidades que se manifiestan en mi mente que te busca en los coches plateados que pasan, en las colas de caballo chinas que veo en la calle, en las bermudas, en las sonrisas, en las miradas. En todo te busco pero no te encuentro. Y ya, sin más que desearte, me hago chiquito y me doy cuenta que no es recíproco, que no es leal, que no funciona así. Me da coraje, me hace sentir mal, y me dan ganas de mandarte a la chingada. Pero no. Ese estúpido remo-ancla, me impide dejar de tenerte fe, dejar de deificarte. Hay algo que me impide cortarte de tajo, hay algo que me impide seguir mi vida sin ti, sin anhelos y con algo nuevo. No se, es un sentimiento, la sola idea de alejarte (mas) de mi vida me hace sentir (mas) miserable y desconsolado.

III


Perdón. Es mucho de lo que sabes decir y se aceptar. Es mucho de lo que pedimos los humanos cuando no sabemos que hacer, cuando nos sentimos acorralados para solucionar algo que no podemos. Es una manera de pedir una justa consideración que nos limpia de cualquier responsabilidad conciente, de acto, de afecto, de fe. Es un regalo que se le pide al otro para no cambiar estatus, para poder seguir, para poder evadir o superar. Perdonar es diferente a pedir perdón. Pedir perdón es quizás por mucho, más sencillo que perdonar. Cuando amas, el dar perdón (perdonar), es un acto de entrega. Entregas en cada perdón un poco más de lo que haz podido dar a otro. Es pisotear tus sentimientos y hacerlos a un lado para decir "si, no hay pedo, está chido", y en el fondo, sin que sepas como, ya acribillaste a algunas pasiones que tenías que soltar, que tenías que gritar, que tenías que exigir. Y eso pasa, porque el amor se vuelve un San Miguel, un arcángel que mata a demonios y que defiende tu divinidad, tu estúpida figura deificada. También entra al mecanismo la parte lógica. Te da la ligera impresión que el origen de dichas pasiones asesinadas provienen de pensamientos infundados. No importa que el pensamiento que desvirtuad a otros pensamientos sea también infundado. Estando frente a ti, y tu acto de pedir perdón, lo que se siente no es otra cosa más que una desesperada angustia por dejar de ver tu arrepentimiento. Se siente algo feo, se siente mal saber que te sientes mal y por eso inmediatamente se perdona al ser amado.

IV


La crueldad es algo imperdonable. No es que le quite al humano su humanidad, de hecho, la crueldad fundamenta la humanidad del humano. No por eso se puede perdonar. La crueldad es un sentimiento que pudiera ser circunstancial. El destino que nos une (unió), por ejemplo, es un destino cruel. Nuestras acciones (las mías al menos) no fueron lo suficientemente crueles para quitarle crueldad al ese patético destino. Y ahora, que no se dónde estamos y que somos, ni por qué nos hemos conocido, me doy cuenta de que no hay otra cosa más que crueldad en este destino nuestro y en los actos que hemos permitido. Y ahora, el juez que vive en mi, me permite decir estas aseveraciones sin importancia:

Cruel tu, al saber de mi amor y no hacer nada. Cruel yo, al seguir lastimándome con ideas estúpidas de un futuro que no pasará. Cruel tu, por dejarme al aire tanto tiempo, por dejarme varado entre mes y meses que solemos vemos. Cruel yo, por esperarte tanto y seguir deseándote generándome ilusiones. Cruel tu y yo, por Casiope. Cruel Casiope por no luchar en este mundo de mierda. Cruel el destino por intersecarnos en ese momento tan fantástico, y más cruel, por permitir que pudiéramos compartir más cosas. Crueles yo y tu, por seguir tomado decisiones que nos harían sentir dañados, que me harían sentir dañado. Cruel el acto que me ha generado el seguir escribiéndote. Cruel, saber que no leerás esto en mucho tiempo, y más cruel, que quizás cuando lo leas, nada de lo que diga aplique ya, al menos no en el mismo contexto o forma.

Luego, después de juzgar y llamarnos pequeños tiranos, me siento bien, y a la vez cabizbajo. Se que no merecemos esos juicios, se que en el fondo, ninguno de los dos quiso eso, pero mi poca firmeza, me sirve para reconocer que ASÍ HA sido. Yo estoy profundamente lastimado y no me duele reconocerlo. La herida, la llaga, la sangre, ahora las veo como un sacrificio de mi ser por todo lo que hay a mi alrededor. Quiero dejar de ser mártir, y ahora, expongo esta herida como un acto de ofrecimiento al otro. Y será quizás con eso, con lo que al final me aferre más a la vida...

Al final, hubo algo que escribí recientemente en el Realiti Chow que va muy ad hoc con esto:

"Al amor lo podemos entender como la disposición de sacrificio hacia algo/alguien."

sábado, 2 de mayo de 2009

CRISIS CREATIVA

NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA, NADA.

Todo en mi cabeza es apatía. Malditas vacaciones forzadas... no, la pandemia mediática no tiene la culpa. Es sólo que ando un poco estancado...

jueves, 23 de abril de 2009

I am mine - Pearl Jam

Desde quizás los 17 años comencé a cuestionarme la existencia de las posesiones. Primero me di cuenta de que cualquier objeto material se podía reemplazar, y no solo eso, también que el humano se adjudicaba espacios y cosas sin algún sentido, sin alguna necesidad básica (comer, protegerse del medio, amar). Ello me llevo a notar que nosotros los humanos somos figuras materiales también, y que entre nuestras curiosidades, solemos tener la capacidad de estar reemplazando a otros objetos materiales. Hay veces, cuando uno crece en la cultura del consumo, que puede volver a las personas mecánica reemplazable. Eso hizo que me pudiera dar cuenta de que las posesiones sentimentales también existían, y que de igual manera, eran una ficción del mundo en el que vivimos, ya que para mi es importante asignarle un sentimiento de unicidad a las personas que me rodean, y tratar de no remplazar a una persona con otra (en medida de lo que pueda mediar con lo que Freud llamaría inconciente). Al final, y después de descubrir que las ideas también eran mercancía, me quedé convencido de que las posesiones intelectuales, sentimentales y materiales son una falacia.

Sin embargo, a lo largo de cinco años en mi vida, específicamente desde hace un par de meses, me doy cuenta de que la posesión no es lo mismo que el respeto a lo que nos integra como personas. Ese cacho único, ese ser perdido en un espacio metafísico, esa intersección en el presente inmediato con la realidad que se llama "Yo" (que se le suele asociar con el ego), es quizás lo más cercano a lo que uno puede tener como posesión en la vida, y por lo cual, uno puede decir:
i.. am... mine...




(el video no es precisamente lo importante, como casi nunca lo es en mi blog. Todavía tengo que aprender mucho para hacer mis propios videos. Tambien sucede que dentro de lo factible, en You Tube no hay otro que no tenga la incersión en HTML activada)


The selfish, they're all standing in line
Faithing and hoping to buy themselves time
Me, I figure as each breath goes by
I only own my mind

The north is to south what the clock is to time
There's east and there's west and there's everywhere life
I know I was born and I know that I'll die
The in-between is mine
I am mine

And the feeling, it gets left behind
All the innocence lost at one time
Significant behind the eyes
There's no need to hide
We're safe tonight

The ocean is full 'cause everyone's crying
The full moon is looking for friends at high tide
The sorrow grows bigger when the sorrow's denied
I only know my mind
I am mine

And the meaning, it gets left behind
All the innocence lost at one time
Significant behind the eyes
There's no need to hide
We're safe tonight
Whoa

And the feelings that get left behind
All the innocence broken with lies
Significance between the lines
We may need to hide

And the meanings that get left behind
All the innocence lost at one time
We're all different behind the eyes
There's no need to hide...

miércoles, 22 de abril de 2009

Neblina de las Tormentas




La niebla. Más perdido nunca había estado. Incubación emocional. Así me pasa. Lo guardo todo para mi y trato de no compartírtelo, trato de no sentirlo para dejar de lastimarme y parar tu confusión. Me atosiga y me contrae para encontrarme con una realidad que no he pedido, me hace encontrarme con una realidad que ya perdí. Te perdí de vista porque me he perdido de nuestro camino. Me perdí pensando, imaginando, soñando. Cree algo que no era real y lo vi real. Sentí un espejismo. Bendito espejismo psicotrópico. Maldita realidad caprichosa.

El amor no es un espejismo. Eso es lo cruel de esta realidad, de este sufrir cotidiano, de este drama interminable. Quizás todo lo demás que hemos vivido pudiera ser un espejismo, pero no esto que siento. Uno siente miles de cosas antes que el amor, pero cuando uno finalmente asume que lo es, ya no hay de otra, es amor y ya se chingó el asunto. Quizás es como el acontecer de la muerte, cuando pasa, ya no hay vuelta atrás, es permanente el cambio, es permanente y asi se queda pase lo que pase. Lo que sucede aquí, es también como la vida, como cuando después de nacer se sigue vivo o se muere. La vida misma, es una institución peculiar que permite la muerte, y la muerte, de alguna manera al acontecer entre los cambios, permite la vida. Quizás lo menos trascendente de dichos procesos está en la pequeña línea que hace diferente a la muerte de la vida. Lo demás, lo que está entre esos dos lugares bipolares, es para mi lo que cuenta. Lo que se vive hasta que uno muere, es finalmente lo que puede significar y trascender. Tu lo llamas experiencia.

Soy terrenal por naturaleza y dramático por circunstancia. Siempre he sido así y tengo que admitir que no siempre me siento conforme con ello. Hubo veces que solo sentía, soñaba y caía. No siempre me aferré tanto a lo que me sucede. Ahora, la experiencia que he adquirido en pocos años me permite saber y afirmar lo que siento. Si, duele, pero también reconforta. Si sólo doliera no estaría aferrándome tanto. Y aunque hoy retomé eso de no saber nada, de no encontrar certidumbres, me queda clara una sola cosa. Te he amado y eso no se cambia de la noche a la mañana.

Otra vez volví a esperarte, pero esta ves es diferente. Soy alguien que cuando espera, generalmente espera lo peor, no por eso dejo de contar otros escenarios posibles, no considero las otras posibilidades, pero al menos las evalúo tantito.

Sigo soñando contigo, esté despierto o esté dormido. Ya no me duele tanto, pero sigue arrastrándome a sentirme arrinconado. Tanto drama sólo responde a la impresión de no querer ser decepcionado y no decepcionar a nadie. Es una responsabilidad muy fuerte esto de asumir el amor que uno le tiene a alguien. Lo bueno o lo malo, es que eso se ha vuelto en un marco de referencia para que me pueda entenderme un poco conmigo mismo. Al menos me vincula con lo que siento y me permite tener una vana y efimera inestabilidad que me reconforta un poco. ¿Qué por qué me reconforta si es inestabilidad?. Sencillamente porque me permite no estar mal todo el tiempo, todo el día. Me deja ratos en los que puedo dedicarme a mis cosas, aunque sea de medio tiempo.

Mañana estaré como si nada, y el viernes andaré buscando un lugar para echarme a llorar. Esa es la inestabilidad de la tormenta en la que estoy. Y la guía que me queda, ese sentimiento burdo y malformado que tengo, solo me recuerda cosas más dolorosas o más frustrantes. También me anima un poco, me hace sentir libre, en un lugar pasado. No hay mas luces, y comienzo a creer que necesito caminar en la oscuridad. Me da miedo, pero se, que eventualmente volveré a ver tu luz. Quizás deje esta analogía y encuentre otro lugar. Quizás amanezca, quizás ya no deteste tanto a la primavera cuando eso pase. Mientras, no me queda otra mas que seguir hacia dónde pueda, hacia dónde mi corazón y mi razón me sigan dictando, cada uno en su lugar, cada uno en sus partes corporales...

miércoles, 8 de abril de 2009

Sick, sad, little world - Incubus

Yeah!, Pues esta rola me prende un chingo... aunque la neta no se la puedo dedicar a nadie mas que a mi... Pinche ego...





No, You're not the first to fall apart
But always the first one to complain
You better get careful or you'll compromise
Everything You are

This world is a drought when out of love
Please come back to us
You're all of the above
"I'm making a choice to be out of touch.
Leave me be." He said,

"Leave me here in my stark, raving, sick, sad little world!"

I've never had unpaid confidantes
It's more than I would care to explain
But I have an open door policy
When it comes to blame

This world is a joke when out of love
Please come back to us
You're all of the above
"I'm making a choice to be out of touch.
Leave me be." He said,

"Leave me here in my stark, raving, sick, sad little world!"

Cara de Niño - Jerry Riviera

Y el demoniio era: Erick Riviera!...

Ese era el maldito demonio que tanto he inquisitado.

Así me dijo mi máquina que era. Pinche computadora sarcástica y burlona.

Me despedí, te di el abrazo, sentí el madrazo y pensaba emocionado tantas cosas que habían pasado que no me lo creía. Luego entré triste y meditabundo a mi cuarto, y me encuentré con ésta canción.

El desagrado fue tanto que me puse a escucharla, dudando de que eso había pasado. Luego, me vi tan reflejado en lo asqueroso de esta canción, que he querido reconocerlo y por eso lo publico: Porque veo una actitud en mi que no me gusta, lo exivo, lo muestro, me quejo, me burlo también de ella. Asi mi naturaleza inquisitiva se siente un poquito satisfecha...

Debut y despedida...






He venido para hablarte
Y de mi cosas contarte
Que conozcas de mi, si, si

Por mi edad tu me dejaste
Que fue un niño lo que hallaste
Y que comienzo a vivir y no es así

Otras mujeres he amado
He sufrido y he llorado
Y he vivido lo mas dulce del placer

No soy niño empedernido
No me juzgues te lo pido
Reconoce que el amor llego esta vez

Soy cara de niño
Con alma de hombre
Quiero amarte para siempre
pero tú no me respondes

Soy cara de niño
con alma de hombre
Ven conóceme te reto
que hay amor pa´ que te sobre

Otras mujeres he amado
He sufrido y he llorado
Y he vivido lo mas dulce del placer

No soy niño empedernido
No me juzgues te lo pido
Reconoce que el amor llego esta vez

Soy cara de niño
Con alma de hombre
Quiero amarte para siempre
pero tú no me respondes

Soy cara de niño
con alma de hombre
Ven conóceme te reto
que hay amor pa´ que te sobre

yo no soy tan niño
tengo alma de hombre

(soy cara de niño)
cara de niño
(con alma de hombre)
hay con alma de hombre

yo quiero amarte para siempre pero tu nome respondes

(soy cara de niño)
soy cara de niño
(con alma de hombre)
con alma de hombre

cariño el amor no tiene edad
y yo te quisiera amar
dejame tratar entonces

(soy cara de niño con alma de hombre)

yo no soy tan niño
y te imbito
no me juzgues por mi cara
ven conoce bien mi alma

(soy cara de niño)
oye mi niña
(con alma de hombre)

pero si un dia
me das la oportunidad de amarte
hazta puede que te asombres

yo te quiero demostrar
lo que siento por ti
pero tu no me respondes

cuanto he sufrido
cuanto he llorado
cuanto he vivido
y tu todavia no me conoces

(cara de niño)
cara de niño, cara de infante
(alma de hombre)
y en las cositas del amor
hazta puedo yo enseñarte

(cara de niño)
no soy niño empedernido no me juzgues te lo pido
(alma de hombre)
por silo quieres saves muchacha mucho he vivido

(cara de niño)
tu me juzgas por mi
cara por mis sueños
sin saver
(con alma de hombre)
reconocelo mi vida
que el amor llego esta vez.

niño ja.

sábado, 4 de abril de 2009

Del Archiduque II


El duque de Gomorra se esconde. Así solito y desolado, y como un niño sin aliento, entre tormentas y terremotos, se va enviciando con la vida. Muerde entre los arbustos chamuscados la poca fruta seca que le queda. Empequeñece. Así trote, corra o camine, tropieza siempre con la misma piedra. Levita, y del cielo le cae un rayo que necesariamente esquiva. Murmura, y desde sus pulmones se le escapan gritos, gritos invocándote, gritos pidiendo demencia, llorando.

El Archiduque se levanta en su tierra, lugar incendiado y seco, muerto, maldito, sediento de su sangre. Él, con miedo se sigue escondiendo. Decrece, maldice, predice que desde cualquier sombra te le aparezcas. Tú, tú sólo te ríes burlándote de su infame demencia. No te ve porque sólo estás en su mente. Allí resides y haz construido un palacio. Eres incorruptible porque eres el mismo reflejo de la corrupción y no hay nada que pueda darte. Su efímera riqueza, con sus castillos intactos, con sus constructo formidablemente formadas, te parecen esbozos de deprimentes pertenencias lejanas a toda humildad, te parecen como patéticas piedras sin alma que corromper, que prostituir, que postergar.

En sus sonámbulas noches, oye tus risas. Se nublan los días en sus patéticos sueños. Se amarga día a día. Leinad grita, grita y llora desesperado. Llora con su sangre un estúpido drama autorreferente. Sus tierras antiguamente rebosantes de poder, riqueza y gloria, son ahora cadáveres y esqueletos. Se volvió un impotente todo poderoso en una nación sin vida: de Gomorra la exuberante sólo quedan muros marchitos, brillos de columnas con inscripciones en diamantes tapados por el polvo, tapados con una masa seca de sangre, carne y cenizas. Todos allí murieron. El terrateniente mayor de dicha nación, el archiduque, el duque Leinad, los mató a todos invocándote.

Primero, su artificial dios celoso, los cubrió con llamas y los dejó abandonados a tu poder. Todos, poco a poco enloquecieron. Abandonaron el palacio para comerse unos a otros. Olvidaron que en el alma se escondían sentimientos, y que en el espíritu conocimiento. Banalizaron y desvirtuaron todo enfoque de la posesión. Después, dejaron de comer verduras y acribillaron a toda bestia restante. Al final, solo humanos matando y comiéndose unos a otros, humanos matando por matar, con gula por la muerte, con gula de sangre. ¿Y tú?, riéndote en la cabeza del rey, usándolo para invocar serpientes, violando a sus hijas y esposas, violando a sus herederos y amigos. Aniquilándolo todo por él mismo. ¿Y el Duque?, buscándote en todos y entretejiendo miradas para matar a todos, para encontrarte en su estúpida demencia, en su fanatismo por dejar de sentirse sólo. Al final, el más fuerte quedó en pié, encerrado al principio en la inmensidad del castillo de Gomorra. Cuando desde su torre no pudo encontrarte en todo el palacio, salió a las hediondas avenidas de sangre, de muerte. Rió, pensó que habías muerto. Los terremotos y los ciclones no cesaron. Te buscó casa por casa. Comía lo que fuera, comía a veces de si mismo un dedo, o una mordida de su brazo. Luego, reía y te maldecía. No había nadie. Él, el último sobreviviente de su nación, trató despreciablemente de escapar. En sus murallas labradas y airosas, no había puertas abiertas, no había guardias que las abrieran. Todo estaba sellado, cubierto de cenizas, o interminablemente irreconocible. Por los parques con residuos de árboles, soñaba en las noches nubladas con verte. No habría pena por destrozarte, por tratar de matarte. Cargaba consigo una espada encantada que podría cortarte en dos, pero nunca apareciste. En los reflejos de los lagos, sólo veía un escuálido reflejo. Bebía sangre y luego vomitaba. Mil y un veces, el pobre archiduque trató de suicidarse, pero siempre lo asustabas y terminaba frustrado.

Así vivirá Leinad, desconociéndose a si mismo, vuelto el demonio que invocó, ahogándose en su sombra sin morirse ni encontrándote. Seco y desolado. Loco y rodeado de cadáveres, sombras y eco en el bullicio de un lugar que ha perdido la vida en su nombre, Gomorra la exuberante, ciudad maldita por su déspota gobernante.